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VIAJE DE ESTUDIOS A LA COMUNIDAD DIAGUITA DE AMAICHA DEL VALLE, TUCUMAN, REPÚBLICA ARGENTINA

23 de mayo de 2016. Como parte de su experiencia de posgrado, los estudiantes de la Maestría en Derechos Humanos y Democratización en América Latina y el Caribe, visitaron la Comunidad de Amaicha del Valle en la Provincia de Tucumán acompañados del doctor Osvaldo Kreimer, de reconocida experiencia en la temática de los Pueblos Indígenas, y de miembros del equipo académico del CIEP.  La Comunidad de Amaicha fue seleccionada como objetivo del viaje de estudios por ser un caso líder de afianzamiento y desarrollo de su autonomía política, de su organización comunitaria y de proyectos comunitarios socioeconómicos.

Se trata de un ejemplo casi único de transición pacífica y democrática al establecimiento de una estructura política autónoma dentro del sistema legal nacional y provincial, con mecanismos e instituciones democráticas, basadas en sus prácticas, saberes y tradiciones y explorando iniciativas destinadas a poner en práctica los conceptos del  Buen Vivir y la libre determinación interna.

Casa de Gobernanza Amaicha
Casa de Gobernanza de los Amaichas

La comunidad diaguita de Amaicha del Valle es hoy un pueblo originario reconocido por el Gobierno Nacional, cuyo territorio reclamado es de 120.000 hectáreas en base a límites y dominio reconocidos por una Cédula Real de la Corona Española  obtenida en 1719.  Hacia fines de los 1990s, el gobierno argentino reconoció su título sobre 80.000 hectáreas de un gran valle en el Noroeste de Tucumán, lindando con Catamarca y Salta, donde habita ancestralmente.

Habitan en ella unos 3.500 habitantes, tanto en sus dos pequeñas ciudades, Amaicha y Los Zasos, como en el área rural, sea en el valle como en las montañas. De todos ellos, alrededor de un 60% son comuneros, es decir miembros reconocidos como parte del pueblo diaguita originario. Dentro del territorio comunitario existen personas (comuneros y no comuneros) que poseen títulos de propiedad del derecho civil argentino.  En temas de propiedad inmobiliaria como en otros (educación, policía, justicia, etc.) coexisten normas y practicas no siempre congruentes entre las normas del derecho comunitario ancestral(o Derecho Mayor) y el derecho común nacional y provincial.  Esta convivencia dinámica de normas e instituciones sirve de marco para la autoridad comunitaria y el desarrollo de proyectos productivos.

La economía del área se basa en la agricultura familiar, el turismo, las artesanías y los servicios.  La actual autoridad comunitaria ha puesto en práctica en estos últimos años numerosos proyectos sociales y económicos, entre ellos una bodega vitivinícola moderna, un jardín de infantes comunitario, una feria de artesanos, un plan de turismo rural familiar, una radio comunitaria, una cooperativa de provisión de telefonía, cable y televisión a toda el área, y otras.

Bodega Comunitaria
Bodega Comunitaria Amaicha del Valle

La visita permite a los/las estudiantes tomar contacto íntimo con esta experiencia político organizativa de una comunidad originaria, conociendo y compartiendo en forma directa sus avances, dificultades, y proyectos.  El contacto se extiende no solo a los voceros institucionales o del poder local, sino también a maestros, asistentes sociales y de salud, representantes de instituciones nacionales, y pobladores comunes.  El diálogo con las autoridades y miembros comunitarios se da no solo en lo intelectual, sino en lo afectivo y emocional, pudiendo identificarse los valores trascendentes propios de una cultura diferente a la propia.

Asimismo para muchos participantes constituye una experiencia de iniciación en la observación y entrevista comunitaria, así como una oportunidad de disipar estereotipos y prejuicios respecto a las comunidades originarias, sus valores y su liderazgo; conocer in situ las tensiones y roces entre las estructuras y expectativas de un proyecto basado en los valores comunitarios, y las instituciones y prácticas de la sociedad global y local no indígena.

Ruinas de Quilmes
Ruinas de Quilmes

Adicionalmente, el contacto con las organizaciones de derechos humanos locales permite conocer el entorno jurídico político provincial en que se están dando estas experiencias comunitarias.  Inversamente, la visita del Programa y de sus estudiantes de América Latina tiene impacto sobre la comunidad, en tanto les da la posibilidad de valorar el interés externo sobre dicha experiencia, les ofrece visiones nuevas y refuerza su compromiso.

Ver Galería Fotográfica en: https://www.flickr.com/photos/98167115@N06/28369588442/in/dateposted-public/